La margarita es una planta muy resistente que florece a lo largo de una gran parte del año, desde la primavera hasta el invierno. Precisa mucha agua y la luz del sol, si bien asimismo se amolda a vivir en áreas de sombra.
No solo es atrayente y da un carácter poético al jardín, sino asimismo deja preparar infusiones y, además de esto, sus hojas son comestibles: conjuntadas con diente de león y también hinojo, dan como resultado una ensalada genial.
Fotos de flores de margaritas blancas
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Pocas plantas y flores como la margarita son tan conocidas y han extendido su nombre a un sinfín de usos. Mujeres, un género de pizza, una isla venezolana, un coctel, localidades en España, Argentina, Italia y Colombia y hasta un asteroide llevan su nombre.
Por no charlar, claro, de sus connotaciones poéticas: quién no ha deshojado una margarita alguna vez en su vida… Mas además de esto, esta planta asimismo es una habitante del jardín y, como tal, corresponde apuntar ciertas de sus primordiales peculiaridades.
La primera cosa que se debe saber es que realmente lleva por nombre margarita a un conjunto de doce especies, que comparten ciertas peculiaridades en lo que se refiere a forma, colores, desarrollo, etcétera.
De ahí que, aunque la más habitual es la llamada bellis perennis (llamada asimismo bellis, bellorita, margarita común, menor o bien de los prados o bien chirivita), por lo general, se puede charlar de la margarita tal y como si fuera una especie única.
La margarita es muy resistente a las enfermedades y plagas, al tiempo que el tiempo temperado es el más apropiado para ella.
La margarita es una planta semiarbustiva, perenne, cuya altura cambia entre treinta centímetros y un metro, si bien lo normal es que alcance unos setenta centímetros.
Sus hojas son verdes y sus flores, muy conocidas: pétalos alargados y blancos (si bien en algunos casos son anaranjados), en torno a un botón circular amarillo.
Oriunda del norte de Europa, la margarita florece prácticamente todo el año: desde la primavera hasta principios del invierno.
La flor de margarita cuando plantarla y cuidados
El mejor instante para plantar margaritas es el final del verano, mediante semillas. Asimismo se reproducen por división, un proceso para el que la estación perfecta es el otoño.
El sustrato más aconsejable es una tierra suelta, con arena y bien drenada. La planta precisa un riego rebosante, sobre todo tras la siembra y a lo largo del verano. Se recomienda que esté expuesta al sol, si bien asimismo se amolda a un ambiente con algo de sombra.
El tiempo más apropiado para ella es el temperado (entre quince y veinticinco grados) y es muy resistente a las plagas y enfermedades.
Aparte de por su belleza y su resistencia, la margarita ocupa un sitio señalado en la botánica debido a sus propiedades culinarias y a que se le han atribuido propiedades curativas.
Entre las primeras, resalta que sus hojas se consumen en ensaladas. Pues su sabor es dulzón, una combinación habitual es la conseguida con diente de león y también hinojo, más amargos.
Margaritas de colores significado
Hay múltiples significados de la margarita normalmente, incluyendo inocencia y pureza. Asimismo ha sido un símbolo a lo largo de bastante tiempo de la belleza tradicional.
La margarita Gerbera ha añadido el simbolismo de la alegría y la dicha debido a su gran cabeza en flor. Estas margaritas son populares para muchas ocasiones singulares por su simbolismo.
La pluralidad y los muchos colores libres las han transformado en la elección preferida para acontecimientos como aniversario, fiestas para bebés, fiestas de boda y felicidades.
Particularmente, las margaritas Gerbera de color rosa suave provocan admiración y simpatía, haciendo de ellas flores que se acostumbran a dar como acto de amistad o bien regalos a fin de que una persona mejore de salud.
Las margaritas de color rosa más obscuro son un símbolo de gratitud y se acostumbran a dar en agradecimiento.
